Evitar accidentes caseros en la tercera edad

La pérdida de control del equilibrio, la dificultad para caminar y la pérdida de la visión son sucesos naturales en las personas mayores.

A veces los hogares se pueden convertir en una trampa. La gran cantidad de medicamentos almacenados, productos de limpieza e insecticidas, dispositivos electrónicos y mecánicos son elementos que no siempre ofrecen la seguridad y el bienestar deseados, puediendo ser un riesgo para las personas mayores.

Suelos resbaladizos, baños inadecuados o mal equipados, escaleras mal iluminadas o empinadas contribuyen a las caídas, que son por lo general las lesiones más comunes que sufren las personas mayores en sus hogares.

Los accidentes más habituales en personas de edad avanzada son:

– Las caídas en la bañera o ducha

– Lugares resbaladizos con poco apoyo cuando el tiempo de reacción es limitada

– A causa de la pérdida de memoria, se dan accidentes de fuego en la cocina, de quemaduras debidas a horno hiper caliente, por mal mantenimiento de aparatos de combustible, etc …

– Errores en la medicación

¿Cómo actuar frente a este tipo de accidentes?

Debemos aprender a reconocer los riesgos en una vivienda aparentemente segura para evitar una serie de accidentes, golpes, quemaduras, lesiones, envenenamiento, etc … Una buena vivienda estructurada y una organización adecuada para los ancianos en el hogar son las reglas a seguir para prevenir este tipo de accidentes, que en muchos casos pueden ser fatales.

¿Qué debe tener en viviendas para los primeros auxilios?

Un botiquín de primeros auxilios en un lugar seguro y accesible, fuera del alcance de los niños, es de gran utilidad para los primeros momentos del incidente.

Hay también algunos accesorios para los ancianos como la teleasistencia domiciliaria. Es un servicio que, a través de la línea telefónica y otros servicios de comunicación específicos, permite a las personas mayores o personas discapacitadas comunicar con un centro atendido por gente capacitados para dar respuesta a cualquier necesidad, desde crisis personales, sociales o médicas, accidentes domésticos, seguimiento permanente desde el centro de atención mediante llamadas telefónicas periódicas, movilización de recursos ante situaciones de emergencia e incluso agenda para recordarles datos sobre toma de medicaciones, realización de gestiones, etc…

Otro dispositivo de teleasistencia es un dispositivo de fácil manejo (botón de emergencia) que pone en contacto al usuario con un Centro de Atención. El dispositivo consta de: un pulsador personal con forma de pulsera o colgante, fácil de usar, que los usuarios llevarán cómodamente con ellos. Se trata de un dispositivo de manos libres, con alcance suficiente desde cualquier punto de la casa, con el que los usuarios podrán dormir sin problemas e incluso bañarse.

Un accesorio importante para la prevención de los riesgos de incendio en las personas mayores es un detector de humos fotoeléctrico. Se trata de un sensor óptico de humo particularmente efectivo en los fuegos lentos con y sin llama.

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